Saturday, February 3, 2007

Km 39: la leyenda del mapache violador


Nunca sabremos si existió, si estaba a metros de nosotros o si a la mera hora no le apetecimos. Jamás sabremos si el mapache estaba ahí, escondido en la maleza del helado Km. 39 de la México-Cuernavaca.

Han pasado 9 años. Roque y yo estábamos en la fiesta de cumple de mi hermana Lawrence cuando mi entonces novia, Erika, se puso pesada y a las 8 P.M. me pidió que la regresara al D.F. porque no pensaba dormir allá.

Bien obediente, hice mi berrinche 3 minutos y luego accedí. Y Roque, como buen hermano, se ofreció a acompañarme e incluso puso su auto (un flamante Jetta plata).

La retachamos sin novedad y, para seguir dándole a mi teatrito, decidimos volver al relajo en Cuerna. Bueno, al menos eso planeamos.

Muy campantes, íbamos platique y platique de la manga y del mandil cuando, pasando el anuncio de "Inicia zona de hielo", el Jetta se quedó inerte al pie del letrero del Km. 39.

"Ahorita prende, ya me ha pasado", me dijo Roque nadando en confianza. Yo le creí, pero el ratito se hizo colgón. 10, 15, 20 minutos y nada. No era una falla, el vehículo de verdad había expirado y lo peor es que, apenas bajamos el vidrio, entró una ráfaga de viento directita desde el polo norte. Y nosotros... con bermudas, playera y chanclas.

Con el celular sin pila, mi compa empezó a ponerse nervioso. "Güey, no se ve nada aquí. Está helando y hay puros arbustos, no se ve nada".

"Sí, y un mapache nos va a violar si no nos movemos", respondí yo, cerrando las piernitas con la firme... idea de no perder el honor, de seguir sentándome bien y de seguir siendo un "mamífero vertical".

Roque no descartó la posibilidad de que esa feroz criatura existiera, así que se ofreció a caminar lo necesario para buscar un S.O.S. a las 11 de la noche. Ha sido la única vez en mi vida en que de plano le he dado la bendición a un cuate.

Se marchó y entonces sí, con el silencio de la noche, me entró la terrorífica imagen del mapache haciéndose grandote y convirtiendo mis pompitas en su nueva cuevita. Lo peor es que... o se apañaba a Roque en pleno acotamiento o me tocaba a mí (no es que estuviéramos frondosos, pero uno nunca sabe los gustos de un depravado ser silvestre).

No quise ni bajar el vidrio para orearme. Si la palabra pánico existe, eso fue lo que me rodeó. Por la tardanza de Roque, juré que había sido planchado por un carro o que la bestia se lo había merendado. Y yo... cuando empezaba a imaginar mis opciones como único sobreviviente, pegué un brincote cuando el imbécil tocó la ventanilla, con hielo en las fosas nasales y con el trasero intacto, gracias a mi bendición. "Ya vienen por nosotrozzz".

Su búsqueda había sido fructífera. El mapache tendría como 20 minutos para acabar con nosotros antes de que llegara la grúa.

La bestia jamás apareció, pero la grúa sí y un tipo idéntico al Chómpiras nos auxilió con su troca. Nos dijo que, más allá de llevarnos a nuestro destino (Km. 87), la regla dictaba dejarnos en el poblado más cercano, o sea, en Tres Marías. Accedimos y él cumplió con su misión, pero cuando vimos que la tierra de las sabrosísimas quecas de día era un pueblote fantasma de noche, casi nos arrodillamos para que nos llevara a Cuerna.

El tipo se puso pesado, pero al ver que éramos unos miserables náufragos, perdidos, hijos de papi, indefensos e inútiles con celular apagado y Jetta fregado, nos propuso la modalidad de suicidio más ad hoc a nuestras posibilidades de pago: "Pues miren, los puedo remolcar hasta el Km. 54 y ahí ponen en neutral el carro y les doy un buen empujón (alburzazo) y con el puro impulso llegarán al 87. Van a subir como a 90 Km/h.. Nomás aguas con la curvota de la 'Pera’. Y por esto pus… les cobraría unos 100 pesitos".

"Ándale pues, este raterote de quinta nos cree idiotas"... pensaba yo justo cuando Roque balbuceó aquella inolvidable frase: "Zzzeñor, hacemos eso y hasta le damos 200". Me quedé con el trasero tan rígido que hasta pensé que el mapache ya me había alcanzado y me estaba olfateando la nuca.

Yo seguía en mi trance y el Chómpiras ya estaba ronroneando su troca para empujarnos. O sea, esto ya estaba decidido. O sea, ya me iba a morir y yo sin reaccionar. Tan absorto me quedé que hasta se me olvidó ver mi niñez y mis highlights en los instantes previos al fallecimiento de uno. Tan retorcida estaba nuestra idea de deceso que en lugar de miles de recuerdos bonitos, sólo me pasó por los ojos cuando mi mamá me dejó caer por las escaleras y cuando mi hermana me daba zapes de chico. Todo al revés.

Recobré la noción en el coche de Roque. Mi amigazo ya iba efectivamente en neutral y feliz de la vida a 90 Km/h., tal y como nos había prometido el "Chomps". No miento, juro que así fue: un Jetta sin vida andando alegremente, cual carreola, sobre la carreterita y hasta rebasando vehículos a su paso. Increíble, inaudito, impensable.

El momento culminante llegó cuando la "Pera" se abrió ante nuestros ojos. "Supongo que vas a frenar...", dije. "No, el señor dijo que si frenamos, no llegamos a Cuerna", contestó Roque. "Güey, yo opino que sí está cañona la curva", insistí. "¡¡¡Qué hacemos, qué hacemos, ¿freno o no?, ¿sí o no?, diiiime yaaaaa!"...

Nuestra discusión seguía cuando ya habíamos pasado la curva. Así de hábiles nos vimos al momento de decidir. Nunca supe si frenamos o no, pero así como escapamos del mapache en el Km. 39, superamos la "Pera" en el 60 y, sí, el impulso nos alcanzó para llegar triunfantes (y vivos) al 87.

Fue heroico, fue impresionante y todo... con tal de regresar como fuera a la fiesta de mi hermanita, quien, al momento de tocar nosotros la puerta, ya estaba plácidamente dormida.

No supe cómo entramos sin llave, pero después de tan estrujante aventura nocturna, créanme: piece of cake.

18 comments:

Lucas Carrabias said...

Mis más grande respeto, si hay una carretera a la que le tengo respeto es la México-Cuernavaca, creo que más que otra cosa de debe a los famosos accidentes que le han pasada al amigo de un amigo de la ex novia de la prima de la nuera de alguno de tus amigos. Pero bueno, una buena fiesta bien amerita correr ese tipo de riesgos, incluso el de enfrentarse a un mapache enfermo sexual.

Anonymous said...

Te cae q se fueron del 54 mal 87 en neutral? Are you fuckin' nuts?

Menos mal q Roque ha de ser un pro del volante o no?

Anonymous said...

Luisillo, te recomiendo que seas más amable con la gente que salvó tu trasero (no digo que tu virginidad porque...pues para qué entrar en detalles además, es algo muy muy personal) de una dolorosa noche (aunque bueno, no me imagino como un mapache puede...:S)

Pasamos mejor a otra cosa..
El valor de tu amigo es de aplaudirse, él se rifó la vida mientras tú, te encontrabas calientito en el auto ...tranquilo, sentadito...sin exponerte a los peligros de la noche, que bien pudo haber terminado con una historia tipo "La Bruja de Blair"

Respecto al Chompi, ¿esperabas a un príncipe azul tipo David Beckham? De esos no existen!!

Bravo por el valor de tu amigo, mal por tu "cero" solidaridad!!

Pero te quiero!! Besos!!
Kariniux!

Gabriela Carajo said...

La cantidad de estupideces que puede llegar a hacer uno a esas edades sin pensar en las consecuencias. Qué bueno que con bendición, con mapache o sin él, ahora lo puedes contar.
Como siempre es un placer leerle.

Anonymous said...

Luis no sabes la cantidad de veces que me rei con tu relato...en la redaccion se me quedaban viendo como diciendo "que le pasa a este w..y".

Oye pero que poca que dejaste morir solo a tu amigo, todavia de que se ofrecio a llevarte a dejar a tu domadora. si yo hubiera sido tu la mando caminando o la pongo a la salida de la autopista a que pidiera un aventon y listo (aunque pensandolo bien entonces ella quiza estaria escribiendo un blog contando su terrible aventura en donde un tipo gordo, tuerto y manco trato sin exito de abusar de ella y como despues de rodar entre la maleza llego alguien en su auxilio con un caballo blanco y... no me cae que ya estoy alucinando, ademas el blog es tuyo y no mio)en fin mejor ahi la dejo y me queda claro que la proxima vez que eso te pase con una lady o un compadre mejor mandalos en taxi.

Anonymous said...

Sólo una cosa más...y la mentada Erikita? Nadie piensa quejarse de ella???? nada de esto hubiera pasado si la susodicha no se hubiera puesto loca!! lo que si tengo claro y que me da gusto es que no seguiste con ella, el mapache no consigió su macabra intención y el Chomps sólo obtuvo sus 200 pesos a cambio...Y todos fueron felices para siempre...

Anonymous said...

Uy hermano!!! nunca me enteré que ese regreso había sido causado por la inmadurez de tu entonces novia, porque de haberlo sabido me cae que no hubiera sido de mi gracia por tanto tiempo, mira que salirse a capricho de la fiesta de la cuñada, no no no, eso no se hace....

Pero en fin , menos mal el Roque es bueno al volante y armaron un buen equipo, porque si te hubiera pasado algo pobre niña!!!

Besitos, te adoro y espero que este cumple la pasemos super increíble...

Tu sis que te ama

Unknown said...

Buena historia digna de contar al pasar por el Km.39 por la carretera a Cuerna.
No sabes las carcajadas, siempre es maravilloso poder leerte...y descubrirte...Te Amo!
Una buena anécdota que creo tú y Roque jamás dejarán de contar.

Anonymous said...

Mi querido amigo,
Me llama la atención la manera en la que has torcido y retorcido esta historia. Has omitido la parte en la cual al regresar yo despues de caminar casi tres kilómetros de carretera al puesto de SOS más cercano, en la más gelida noche del siglo XX,encontré el coche bien empañadito (nunca he querido concluir nada), ni el extraño hecho que esa noche estuvo usted largo rato en la tina mientras yo me emborrachaba con la mísera cantidad de dos coronas(siempre he sido malo para beber). Tambien recuerdo que la gente de la agencia donde dejé a reparar mi automóvil me dijeron que había muchas "bolas de pelos endurecidas" de incierta procedencia, en la parte inferior del asiento del copiloto. Puede que Mulder quiera investigar este asunto.
Excelente aventura, de hecho tambien recuerdo que durante mucho tiempo vistamos el el altar que levantamos "in situ", cada vez que pasabamos por ahí. Alguien debe tener esas fotos.
Buenos recuerdos Luis y saludos.

Anonymous said...

Ay amigo, tu mejor ni te quejes que quien la sufrió por todos lados (bueno eso quien sabe...) fue Roque, mira que quedarse sin coche nuevo, caminar solo a medianoche en la niebla y con un mapache suelto... no cualquiera, mis respetos, jaja!

Anonymous said...

Seguro que ese mapache no era tan furioso como ustedes pa' aventarse La Pera en neutral, y además, le pagaron doble al "gruyero". Definitivamente, cuando se trata de chupar, nada puede detener el impulso

MOU said...

Eso les pasa -punta de ignorantes- por no ver el Discovery Channel y saber de lo que un mapache es capaz (y de lo que no)... recorriendo como recorro esa carretera tan frecuentemente me parece una verdadera proesa (asumiendo que la historia sea cierta) que hayan llegado hasta "la puerta" de Lorena. Y finalmente, aunque un poco tarde, quizás les sirva saber (ya que el chomps no lo supo porque en su vida ha manejado o tenido un buen coche, perdon pero es neta) que los Jetta y todos los coches con dirección hidráulica NO frenan cuando están apagados (quizás sólo una vez) dada la naturaleza (hidráulica) del sistema, de hecho la dirección se pone dura (no, no es albur) y es increiblemente difícil manejarlos, por lo que habrá que admirar más la pericia del conductor (vuelvo a asumir que la historia es cierta).

Chanfle II said...

Ya lo dijo Roque, tú distorsionas todo el asunto. Qué se me hace que el que en verdad te dio un empujón fue el Mapache, o sea, el galán más solicitado de Tres Marías, y el mismo que dejo bolas de pelos en el Jetta. Qué se me hace...

Anonymous said...

jajajaja ay Luis yo nadamasme sabia lo de que se les paro el coche pero no sabia eso de Roque jaja, pobre estuvoapunto demorir

tqm

Anonymous said...

INCREIBLE MIS ANGUSTIAS CON ALEX Y CADA DIA DESCUBRO O ME DESCUBREN QUE LOS PADRES NI LAS MANOS METEMOS EN ESTO DE LA EDUCACION Y LOS CUIDADOS DE LOS HIJOS. BUENAS JOYITAS ME ENVIO DIOS COMO ENTRENAMIENTO PARA ALEX.
SIN EMBARGO, QUE FELIZ QUE ESTES VIVITO Y COLEANDO Y LO PUEDAS CONTAR. CREO QUE EN EL FUTURO TOMAREMOS PROVISIONES Y MEDIDAS PREVENTIVAS.

Anonymous said...

Luis o tu psiquiatra es muy bueno o eres un delirante fan de los naufrágos de San Blas. La pregunta es...
Después de semejante hazaña, tu heróico amigo quedó como tú ó está viviendo semejantes delirios. Ahora puedo comprender lo de Diego y Amanda, definitivamente cualquiera se trauma con estas cosas, habrá sido realmente sólo eso ó nos queda pendiente un misterio aún por revelar? Un mapache?????

Anonymous said...

Retomando...
Fue un mapache o la mapacha?
Ahora entiendo tu afición al Big Brother. Por cierto, las cuervas a las que te refieres fueron de la pera? ó de la mapacha...

Anonymous said...

Yo puedo decir que he escuchado la historia unas 30 veces desde que sucedió, y siempre siento el mismo escalofrío. Me gusta revivirla con Uds. A pesar del susto, es una de los 'milestones' de esa buena época. Nótese que Roque era capaz de regresar a las fiestas... Ahora ya ni va, hehe.
Yo tengo una foto que nos tomamos en el KM 39 cuando fuímos a Acapulco una vez (cuando quieran se las paso).
¡Saludos!