
En las últimas 34 horas, me excedí al cortarme el cabello con la cuchilla nivel 3, manejé 5 kilómetros en 55 minutos, observé la ciudad desde un piso 10, firmé mi divorcio frente a un burócrata que no te mira por un segundo, almorcé 5 quesadillas con salsa roja, pagué 800 pesos por permanecer 35 segundos estacionado en lugar prohibido, tomé media taza de café, le agradecí a Gabs los 17 años de amistad pero ante todo los últimos 7 meses de hermandad, comí media pechuga de pollo y lavé platos en 15 minutos.
Busqué el no. 2229 de una calle, bosquejé con mi padre un viaje de 12 días a Europa para el noveno mes del año, platiqué en el coche 30 minutos con Princess Janne con la sensación de que habían transcurrido 5, cené un plato de cereal, le di 65 vueltas a la almohada durante la noche, amanecí con la mejor imagen del viernes, felicité a Lawrence por su cumpleaños 34, escuché una rola de Joy Division 7 veces y tomé un taxi por el que pagué 9.75 pesos.
Llegué al trabajo para revisar 627 correos, saqué 2 grandes pendientes en 20 minutos, me informaron que la reparación de mi coche asciende a 8 mil pesos, estuve una hora en una junta infumable, abracé 2 veces a Alex deseándole suerte para un concurso de pintura, fui a comer 2 hot dogs al cine sin ver película, dediqué un par de oraciones al escuchar una ambulancia cercana, llené 6 páginas pendientes de mi diario, me encerré con mi jefe para recibir en 10 minutos consejos con garantía de toda una vida, tomé 2 pastillas, anhelé un pie de queso y robé 1.9 segundos para expresar en 5 letras lo que ni en otras circunstancias, ni en 1000 momentos diferentes, diría.