Monday, November 29, 2010

Breve historia de un encuentro cósmico


En un viernes "de esos" nos conocimos (yo crucé 4 palabras; ella 2). En aquel domingo la besé con una rola de Zoé de fondo. En ese despejado viernes londinense una moto estacionada en Hanover Square nos vio comprometernos. En el más reciente sábado nos hemos vestido de gala para hacer oficial lo que ya era real. En algún instante del próximo año, primero Dios, comenzarán nuestras desveladas... porque un angelote nos convertirá en padres.

La vida cambia en cualquier momento. El dolor aparentemente insoportable llega sin aviso, pero el placer terminantemente más grande también. La suerte es un mero y ocasional intruso.

Hay que saber recibirlos.

Tuesday, November 23, 2010

Dream



El mejor regalo lo puedo recibir este mismo jueves en la tarde. Y eso es que, primero Dios, estés como nueva. Seguro estoy de que todo saldrá fenomenal.

Dream, te amo más que cuando me cargaste por primera vez.

Escuchemos "Feelings", una de las canciones con las que más fácilmente dibujo en el aire la sonrisa de mi madre.

Wednesday, November 17, 2010

El flaquito


El 18 de noviembre de 2008 fui con mi madre a ver a R.E.M. en el Auditorio Nacional y de aquella noche recuerdo lo siguiente:

- Salí del trabajo volando para verme con ella afuera del inmueble.
- Nos tocó en unas butacas algo lejanas, pero de cualquier forma el lugar era muy bueno.
- En varias ocasiones mi madre se paró a aplaudir las rolas de estos gringuetes.
- Se la pasó haciendo comentarios sobre lo mucho que le gustaba Michael Stipe, a quien meramente llamó "el flaquito".
- Nunca antes lo había hecho, pero nos salimos un poco antes de terminar el concierto, justo cuando tocaban la insulsa "Country Feedback" (y perdiéndonos, en consecuencia, la memorable "Man On The Moon").
- Pasamos, según mi memoria, una velada única.

Aquí un extracto de uno de esos momentos que se quedó mal grabado en la memoria y en la cámara. Una de las más bellas canciones que he atestiguado en concierto...

Hoy que revivo ese instante del que mañana se cumplen precisamente 2 años, le pido a Dios le devuelva a mi hermosa güerita la sonrisa y la alegría de entonces.

Aunque no venga el flaquito Stipe.

Sunday, November 14, 2010

Y Alonso... sigue sin pasar a Petrov


Y, curiosamente, los últimos tres campeones del mundo en la F1 suben al podio. Vettel campeón en 2010, Button en 2009 y Hamilton (mi idolazo) en 2008.

¿Y Alonso?...

Mmm, creo que sigue atrás de Petrov, todavía no lo pasa. El ardidete español ya hasta le pintó cremas al ruso por no dejarlo pasar. Se le olvida una cosa... no es Massa.

No cabe duda: el deporte, por voluble que sea, siempre termina premiando al mejor y castigando al tramposo.

Monday, November 8, 2010

Bar Italia


Siempre fue fascinante encontrar de pronto un lugar del que se hablaba en la letra de una canción.

En 1995, Pulp describió al Bar Italia como uno de esos sitios básicos que se encuentran en Londres, "doblando la esquina.. en Soho". Hace un par de meses, sin querer, nos topamos con él mientras caminábamos por Frith Street y no quise dejar pasar la ocasión de captar en una pésima foto el inmueble al que, según Jarvis Cocker, acuden los de corazón roto para calentar sus heridas con café amargo.

Valga la mención ahora que se ha anunciado el regreso en 2011 de Pulp, la banda a la que jamás he podido ver en vivo. Valga mi felicidad absoluta por ello.

Monday, November 1, 2010

103


Un concierto de Andrés Calamaro tiene mucho para destacar en una conversación privada. De entrada, hablamos del que hace pocos meses se autodefinió en uno de sus temas como "Sexy y barrigón". De eso queda nada. Lo describen mejor su pésimo baile y sus gafas.

Desde que comencé a seguirlo en 1997, le he mirado cambios y hoy veo un Calamaro finísimo, aunque raro sin sus rizos de mediocampista de Chacarita. En pleno show se le nota que vive entre Buenos Aires y Madrid. A veces rock animal de estadio, a veces baladas de intimidad punzocortante. Pero todo llega. Y llegó el viernes con letras que tienen hondura y hasta maldad.

Durante más de las dos horas que marca el reglamento, Janett y yo lo miramos en silencio desde el par de butacas del primer piso, agradablemente apartadas del resto. Suerte en el boletaje, suerte de espectadores. Todo con tal de escuchar los versos de un argentino que con las sobras de otros puede hacer croquetas sonoras. Y otras piezas son maestría pura: "El salmón", "Buena suerte", "Tuyo siempre", "Sin documentos", "Comida china", "All You Need Is Pop", "Estadio Azteca". Entre su andar en solitario y lo que rescata de Los Rodríguez, solventa su nimia producción con la potencia de las varias guitarras que lo acompañan y con su gusto hacia los ritmos de las provincias. Y si hay dolor, viene embarrado con mermelada.

En particular, gocé "Tres Marías", sufrí más de la cuenta con "Crímenes perfectos" (¿quién no?), y saqué del panteón a mi hermano David con "Los chicos", seguramente mi nueva predilecta en detrimento de "Media Verónica"... que brilló por su ausencia y ha envejecido mucho.

Hace tanto que no me invitaban a un concierto, todo pagado, todo incluido... hasta los pastelillos previos y el chocolate caliente. Gracias eternas a mi mujer por ello, pese a mi silencio de sepulcro y mis ojos fijos en el escenario y en mil partes más.

Mi concierto 103 ha sido uno de los 10 mejores. Por instantes, sustituí el habla con lágrimas.

Recomiendo ver a Calamaro antes de morir y antes de que él nos deje con muchas incógnitas respecto a sus letras bombachas, irresponsables y sin rima.

El salmón que alguna vez aclaró que no le excitaba cagar en el mar...